Las derrotas son muy dolorosas en cualquier deporte, pero en el futbol el sentimiento se hace más agudo, derrotas como la sufrida anoche por América son las que más duelen a la hinchada, no por el rival, por la condición de local o por el resultado, sino por la forma como Juan Carlos Gruesso dirigió al equipo, la forma como el panameño Aguilar y Sergio Galván desperdiciaron las oportunidades de gol ante la portería visitante y porque como hincha uno cree que este equipo puede dar más, desafortunadamente el trabajo no se respalda con resultados.
América fue el equipo que más hizo por la victoria, creo mayor cantidad de oportunidades de gol y siempre busco pisar el área contraria, pero fue el visitante quien se llevo el gran botín.
Una fuerte marca en el medio, un brillante portero, un contragolpe letal y aun la suerte fueron los argumentos del Cortulua anoche en el Pascual, fue un equipo bien parado, que busco el resultado, su mayor merito fue defenderse bien y anotar el gol de la victoria cosa que no fueron capaces de hacer nuestros jugadores.
La derrota deja comprometido al equipo con el fantasma del descenso, aunque falta mucho camino por recorrer como para corregir los errores está claro que el equipo necesita cambios urgentemente.
Lo poco rescatable de anoche es el paraguayo Oscar Nadin Díaz que en menos de 45 minutos mostro tener más nivel que Belmer Aguilar y Julián Carabalí, ojala el paraguayo haga parte de la nomina titular no solo en el próximo partido en el que será reemplazo obligatorio de Carabalí, sino en los demás encuentros.
Alexis Viera es otro punto destacable en el Rojo, transmite la seguridad en el arco y además es un líder en la cancha, poco a poco se abre camino de ídolo entre la hinchada.
Lo que se debe mejorar indudablemente es la definición, tanto Galván, como Aguilar tienen la pólvora mojada y sin goles no se puede ganar un partido de futbol.
Las expulsiones, penales en contra y tarjetas amarillas deben revisarse con cuidado, pues esto se presenta desde la pretemporada y le sigue trayendo problemas al equipo.
Los cambios que realiza el técnico son el tema que provoca el mayor malestar en la hinchada, pues ayer cuando sustituyo a Galván por Toloza, la protesta de la hinchada fue general. A esto se le debe sumar la mala lectura que tiene Gruesso de los partidos y la mala resolución desde el banco para corregir sobre la marcha.
Para finalizar, ayer después de la conclusión del partido, la tribuna la emprendió contra Gruesso, a quien llamaron burro.
Aunque Gruesso es responsable de lo que ocurre en la cancha, la responsabilidad mayor corresponde a los directivos. Estos personajes son los directos responsables de la situación que vive América, su negligencia en el proceso de democratización, su prepotencia al despedir de la peor manera a Diego Umaña y la poca visión al nombrar como director técnico a Gruesso Los hace los directos responsables.
Ya es hora que abran los ojos, si en algo aprecian a la institución Escarlata den vía libre al proceso de democratización o den el paso al costado.
